Este es un experimento comunicativo, un espacio personal sin fines de lucro, abierto al diálogo y la opinión de todos los visitantes.
Una premisa importante: cambio mi post cuando -a lo menos- se hayan acumulado 13 comentarios, aunque no estrictamente... Ni mucho menos. Linea directa: pipiolex@gmail.com
No busques colores ni diseño. Lo mío es el texo puro y una que otra foto. Saludos desde Chile.
Hace muchos años en Av. Libertad con Ocho Norte en Viña del Mar (Chile) comenzó un viaje que me llevó a descubrir el secreto del amor. En fin... Pero yo quiero hablar de la libertad, siguiendo el camino trazado por el post anterior.
La Libertad es la capacidad de hacer algo de una forma u otra, o simplemente no hacer nada. Para entender un poco mejor, hagamos el ejercicio de los opuestos: La libertad se opone a la esclavitud y a la prisión.
La expresión máxima de la libertad es la libertad de pensamiento, claro, esa libertad es absolutamente personal e inofensiva. La Libertad de opinión es una de las aspiraciones más queridas de las sociedades, pero tiene algunas restricciones impuestas por la misma sociedad.
La libertad de la acción tiene también restricciones... Como siempre se dice: "La libertad de una persona es válida hasta que no choque con la libertad del otro". Ejemplo: Zidane tenía la libertad de "pensar" lo peor de Materazzi, pero actuó con libertad al pegarle el cabezazo en el pecho. El italiano, por su parte tenía la plena libertad de pensar lo que quisiera de la familia o del país del Zidane, pero al momento de expresarlo, chocó con la libertad de cabezazo. Horacio Elizondo, el árbitro, por su parte, tenía la libertad de dejar pasar la agresión, escuchar o no al cuarto árbitro, en fin... El ejemplo da para mucho.

Una cosa es clara, yo prefiero la libertad a la restricción, a la esclavitud, a la cárcel, a la dictadura. Y si estoy claro en no ofender a Zidane, entonces no tendré que temer de su cabezazo.